dPosta – Blanquear el cobro de gastos reservados “en negro”, que de por sí ya parece una idea poco feliz para un político que pretende conservar sus beneficios, además de la bronca ciudadana que dispara este tipo declaraciones, en esta ocasión, destapó una impensada y feroz interna familiar.
La diputada del PRO, Celeste Rivas, junto a su compañera de bloque Noelia Viara, ambas en el candelero por estas horas a raíz de su posición contraria a Medanito, participaron del programa “Se Picó” de Radio Kermés y en un clima de entrevista distendida, y por momentos jocosa, se abrieron a comentarios que, a oídos de los contribuyentes, causan poca gracia.
Consultadas por los gastos reservados, Rivas admitió que “cada legislador recibe aproximadamente $1.200.000 por mes, que no aparece en el recibo, y puede usarlo como quiera, sin dar explicaciones”. Aclaró también que, aunque supuestamente ese dinero tendría como fin hacer “colaboraciones” a personas o instituciones, en su caso también lo usaba para pagar su alquiler o gastos de su vehículo.
Remarcó también que no dependía de ella dejar de cobrar ese dinero al señalar que “si quieren, nos ponemos de acuerdo y no los tenemos más. No somos nosotras las que decidimos eso”.
Para bajar el tono, su compañera Noelia Viara agregó “por ejemplo, (el radical) Hipólito Altolaguirre transforma los gastos reservados en becas para chicos. Nosotros, como los subsidios no alcanzan, a veces tenemos que recurrir a esa plata, que tampoco alcanza”, dijo.
Delincuente
La entrevista a la diputada sumó, además de decenas de comentarios en redes sociales, una impensada y feroz interna familiar. Su hermana, Antonella Rivas, eligió el mismo medio de comunicación para destrozarla. “No asocien mi apellido con esta delincuente, que le roba al Estado y que usa sus contactos políticos para escalar”, disparó la mujer.
Antonella Rivas tiene de 35 años, es madre soltera y oriunda Macachín, aunque reside desde hace tiempo en la capital provincial donde trabaja como gestora.
Indignada, dijo de su hermana diputada que “siempre se vendió y siempre usó su aspecto de buenita para cometer toda clase de delitos”.
Comenzó que el padre de ambas cobra una jubilación mínima y atravesó recientemente por un cáncer, para aseverar luego de su hermana que “está del lado de los que cagan a palos a los jubilados, mete los gastos reservados en su alquiler y en gastos personales mientras, mientras yo pido subsidios para los remedios de mi viejo”.
Recordó luego que “nosotros venimos de familia laburante, honesta. Mis abuelos paternos peronistas, los maternos radicales. Mi viejo socialista”. Y apuntó nuevamente a Celeste al afirmar que “sus abuelos le dieron vergüenza, porque eran analfabetos, ella borró su historia…”.
Y ratificó “yo estoy muy orgullosa de mi apellido, porque es un apellido de laburantes y honestos. Esta que siempre renegó de sus orígenes, no heredó absolutamente ningún valor, siempre se vendió y siempre usó su aspecto de buenita para cometer toda clase de delitos. En todos los árboles hay frutos podridos, bueno… en el nuestro la tenemos a esta”, remató.